Las Tecnologías de la Información y el nuevo paradigma social y económico de los ODS de Naciones Unidas
06/2016
Agradecimiento y ponencia de A. Gradolí en la XX edición de entrega PREMIOS CIUDADANOS 2016 a NUNSYS en el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Madrid 9-6-2016
Video (1) ponencia: El giro copernicano económico y social.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible –ODS– también conocidos como Objetivos Mundiales, son 17 grandes objetivos de aplicación universal aprobados por Naciones Unidas en septiembre del 2015 que han entrado en vigor oficialmente el uno de enero de 2016.
Video (2) agradecimientos por el premio: El «instinto» de hacer las cosas bien.
https://www.nunsys.com/rsc-galardon-premios-ciudadanos/
Definidos por Ban Ki-moon como “el camino hacia la dignidad para 2030”, los 17 ODS contemplan 169 metas y están basados en tres grandes pilares fundamentales: el desarrollo sostenible, la integración social y la protección del medio ambiente.
Cabría preguntarse ¿Qué es el desarrollo sostenible?
El desarrollo sostenible se ha definido como “el desarrollo capaz de satisfacer las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades”. Esto es, tenemos que comprender que no somos los amos del planeta, sino que meramente lo habitamos en usufructo planetario, por así decirlo, ya que nos pertenece tanto a nosotros, como a las futuras generaciones.
Algunos de estos 17 ODS son los siguientes: poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo; garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos; garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad para todos; lograr la igualdad de género; promover las sociedades pacíficas y reducir las desigualdades en y entre países.
Una meta ODS relacionada con las TIC (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) es la siguiente: «Para 2020, aumentar sustancialmente a nivel mundial el número de becas disponibles para los países en desarrollo …. incluidos programas de formación profesional y programas técnicos, científicos, de ingeniería y de tecnología de la información y las comunicaciones, en países desarrollados y otros países en desarrollo».
Sin embargo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible no son jurídicamente obligatorios, no obstante, se prevé que los países los vayan adoptando paulatina y voluntariamente.
Desde mi punto de vista, los ODS, vislumbran un cambio de paradigma en la manera de concebir el mundo. Hasta el momento y desde al menos el siglo XIX los occidentales tenemos la percepción de que la economía tradicional y la tecnología parecen ser más importantes que el bienestar general de las personas. Sin embargo, la ONU quiere dar una nueva respuesta a la pregunta fundamental: ¿Qué es lo importante?, y contesta afirmando que lo importante son sus 17 objetivos de alcance universal para transformar el mundo, basados en los tres pilares fundamentales: el desarrollo sostenible, la integración social y la protección del medio ambiente.
Trataré de ejemplificar esta idea del cambio de paradigma que los ODS dejan entrever. Imaginemos que el Sol, fuente de calor, es la prosperidad y la Paz, y el planeta Tierra representa la tecnología y la economía.
Antiguamente, en el modelo astronómico de Ptolomeo, la Tierra (la tecnología y la economía) estaba situada en el centro del universo, esto es, lo más importante, mientras que el Sol, (la prosperidad y la Paz) simplemente acompañaba a la Tierra en su voltear diario.
Durante la revolución científica del siglo XVII nos encontramos con el paradigma copernicano y comprobamos que estábamos equivocados, que es totalmente al contrario, que la Tierra es la que gira alrededor del calor, de Sol. Dicen que Galileo susurraba Eppur si muove, y “sin embargo se mueve”. Pues algo análogo ocurre con los ODS, porque ahora el Sol (la prosperidad y la Paz) están en el centro de todas las miradas y son lo más importante, y la Tierra, en nuestro caso las TIC y la economía sostenible, son la caja de herramientas que deben contribuir a mejorar la prosperidad y la Paz de todos los seres humanos.
Este nuevo paradigma es sin lugar a dudas una revolución social, una revolución a largo plazo que involucra de manera imprescindible a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. En definitiva, los Objetivos de Desarrollo Sostenible son un nuevo y deseable cambio de paradigma: un giro copernicano social y económico.
Todos sabemos que un cuchillo es una herramienta que puede servir tanto para cortar un pedazo de pan como para agredir a las personas. En este sentido, las TIC al igual que cualquier tecnología puede servir para generar prosperidad y Paz, pero también para multiplicar las injusticias y las guerras, y para evitarlas debemos tener siempre presente, que la ética y los ODS debe ser nuestra bandera.
Es por esto, por lo que hay que seguir bregando día sí, otro también, en mantener, reforzar y hacer cumplir, sobre todo a los políticos, absolutamente todos los valores de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (dignidad, libertad, igualdad, solidaridad, justicia y Paz) y a la postre, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU previstos para los próximos 15 años.
Así las cosas, hace tres lustros, en el Libro Verde de la Comisión de las Comunidades Europeas, se formuló el objetivo de que la Unión Europea quería para el año 2010 convertirse en la economía más competitiva y dinámica del mundo, que fuera capaz de crecer de manera sostenible con más y mejores empleos, con menos desigualdades y con una mayor cohesión social. Evidentemente esto no se ha cumplido, pero ahora tenemos una nueva oportunidad y no solo desde una perspectiva europea sino mundial.
En NUNSYS ya estamos orientados en la línea de la sostenibilidad y animamos a todos los presentes a trabajar para que las TIC ayuden a construir la posibilidad de que los tres pilares del paradigma de los ODS: el desarrollo sostenible, la integración social y la protección integral del medio ambiente, sean algún día una verdadera realidad.
En conclusión, y a modo de reflexión, este nuevo y deseable paradigma socio-económico, considerando que la Tierra la habitamos en usufructo planetario, será una realidad, si y solo si, se afrontan los cambios necesarios de una manera decidida y valiente, tanto por la esfera política, como la civil, y la empresarial.
Arturo Gradolí
9-6-2016